Tras
comentar y debatir las ideologías en el grupo, he decidido reflejar los
conocimientos aprendidos en esta entrada. La forma con la que lo hemos
realizado ha sido exponer uno por uno la ideología que le correspondía y los
otros apuntaban para seguidamente complementarla o criticarla
constructivamente. Además, teniendo en cuenta el comentario de Víctor, he
modificado la entrada y de todo esto puedo reflejar:
Culto al rendimiento: Consiste en darle
importancia a las facultades físicas mejores de cada individuo, esta ideología
está basada en la selección de aquellos más fuertes y mejores. Es fácil de
evaluar por su simplicidad pero no es la mejor forma educativa, y además tiene
muy presente la competición, la exclusión, el estado de forma, el sufrimiento
ligado al rendimiento y las cargas del entrenamiento, Tinning (1993). El culto
al rendimiento está contrapuesto con el recreacionismo deportivo, es decir, es
la tendencia radicalmente opuesta donde el objetivo principal es la diversión,
siendo anti elitista y anti-tradicional.
Igualitarismo: Esta ideología destaca que todo
individuo debe dar y recibir un trato equivalente. Tiene 3 principios
fundamentales: igualdad de acceso, igualdad de derecho e igualdad de
oportunidad. Lo más importante es que aquel que carece de oportunidades sea
ayudado para que posea las mismas que todos. No obstante, no todos los que
presentemos menos oportunidades hemos de ser tratados de la misma forma, sino
de manera equivalente, es decir, con respecto a las necesidades que requiera
cada uno. Cabe destacar que el igualitarismo es la ideología como reacción al
sexismo para evitar así la discriminación sexual y ser más justos. Consecuentemente,
el igualitarismo está basado en el principio ético de justicia, en que todos
debemos ser tratados de igual respeto. Según Bennison et al (1984) en el caso de la discriminación por género
el punto clave consiste en respetar aquello que los niños y niñas, hombres y
mujeres poseen de diferente y similar, de manera que sean tratados por igual en
aquello en lo que no haya diferencias significativas y de forma distinta cuando
sí las haya.
Culto a la delgadez: Se da en las sociedades
modernas y consumistas, como la nuestra. Esta ideología se dirige a las
mujeres. Se concibe que las mujeres delgadas están mejor valoradas, son más
femeninas. Aparentemente con la delgadez se cree que las personas tienen mejor
salud, pero se estereotipan, se ponen etiqueta. Además, para lograr la delgadez
se emplean un sinfín de productor caros y muchas veces ineficaces, con lo que
se potencia el consumismo. Y entonces, ¿por qué creemos en el culto a la
delgadez? La respuesta está en los medios de comunicación, los cuales difunden imágenes
sobre el “cuerpo deseado socialmente”. A diferencia de las otras ideologías, el
culto a la delgadez y el mesomorfismo no están opuestas sino que son dos
manifestaciones de una sola ideología, la de la forma corporal, la cual es una
ideología sexista porque estamos etiquetando o vinculando dos grupos
heterogéneos diferenciados socialmente por el género.
Mesomorfismo: Esta ideología afirma que el ideal
para los hombres es tener un buen físico y estar fuerte, voluminoso.
Consecuentemente, se cree que aparentando un cuerpo musculoso se está sano.
Para conseguir este ideal, es necesario disponer de gran cantidad de
suplementos y atender a las necesidades del cuerpo, por lo que vuelve a
aparecer el consumismo. Desde mi punto de vista, el mesomorfismo ya no solo se
transmite a través de los medios de comunicación sino que está muy arraigado a
los gimnasios, donde el objetivo principal no es mejorar o mantener la salud,
sino buscar la hipertrofia muscular incluso poniendo en riesgo la salud. En
relación con el sexismo, aparece una dicotomía, donde los hombres deben ser
masculinos (mesomorfismo) y las mujeres femeninas (culto a la delgadez).
Recreacionismo: Esta ideología consiste en el
placer de divertirse por pura diversión y es el lado opuesto del rendimiento
deportivo por ser anti-elitista y anti-tradicional, por lo que está relacionado
con el sexismo: antes se ofrecía un balón a los chicos y una comba a las
chicas, actualmente ocurre parecido pero con otros objetos y circunstancias. En
esta ideología, las actividades físicas que poseen valor educativo pierden el
sentido, es decir, se convierten en un descanso para otras actividades más
importantes. Esto está reforzado por la creencia en que los estudiantes ya
tienen bastante en mantenerse ocupados, felices y contentos. Un claro ejemplo
es pagar dinero a cambio de diversión pura y dura, lo que se encuentra fácilmente
en un parque de atracciones.
Sexismo: Ideología que discrimina a las personas con el
objetivo de menospreciarlas y al mismo tiempo sentirse superior juzgando
simplemente las características del grupo al que pertenecen. Es decir, la
discriminación existente se basa en la dicotomía en que los hombres han de ser
masculinos y las mujeres femeninas. Cabe destacar que existen sexismos contra el
género femenino, contra el masculino, contra los intersexuales (hermafroditas y
pseudohermafroditas) y contra los transexuales (masculinos y femeninos). El
sexismo es la palabra que utilizamos para referirnos a las desigualdades.
Consecuentemente, el igualitarismo está en contraposición y se puede considerar
una solución a esta ideología, sin embargo no es la única, en las escuelas se
deberían plantear juegos modificados y ciertas circunstancias moralmente
aceptables para evitar que se reproduzcan los estereotipos masculinos y
femeninos (Bonal, 1997).
Como reflexión personal, y sabiendo que todas las
ideologías están relacionadas con el movimiento, creo que las ideologías no
siempre no aportan cosas positivas por conocerlas y/o practicarlas sino que
muchas veces nos quitan libertad de decisión. Por ejemplo, nos podemos plantear
si vivimos para el cuerpo o si el cuerpo nos sirve para vivir, en el caso del
mesomorfismo o el culto a la delgadez. Otra ideología que me ha llamado la
atención es la del envejecimiento, la cual se puede ver desde dos perspectivas:
-Nacemos débiles e ignorantes y a partir de la
juventud y madurez somos conscientes, fuertes y sabios hasta llegar a la vejez
donde volvemos a la ignorancia y debilidad.
-Sin embargo hay otra centrada en la libertad:
nacemos libres y puros, luego al crecer nos convertimos en una especie de
esclavos de las diferentes corrientes, pensamientos e ideologías. Finalmente,
en la vejez volvemos a recuperar esa libertad.
Por todo esto:
¿Las
ideologías nos hacen libres o nos atrapan pensando que lo somos?
¿Desde las
dos perspectivas de la ideología de la vejez, crees que las ideologías nos
aportan lo mismo?
(Se admiten
comentarios!!)
Según Fullan (1992), tras conocer las ideologías,
hay que realizar cambios educativos, el éxito de los cuales depende principalmente
de los profesores. Así podremos adaptarnos y poder extraer los mejor de las
ideologías y al mismo tiempo no estar sumisas a ellas, sino ser libres con
ellas.
Los niveles de cambio, de menor a mayor dificultad
son:
Proponer nuevos materiales y actividades, luego
cambiar los métodos y tareas de enseñamiento-aprendizaje, para finalizar con el
cambio de creencias y valores que influyen en la comprensión de los temas e
ideologías pedagógicas asumidas.
Como
satisfacción personal, os dejo unas frases sobre la libertad de reconocidos
autores:
El pobre no
es libre: en todas partes es un siervo. (Voltaire)
La libertad
es una sensación. A veces puede alcanzarse encerrado en una jaula, como un
pájaro. (Camilo José Cela)
Un pueblo
no es verdaderamente libre mientras que la libertad no esté arraigada en sus
costumbres e identificada con ellas. (Mariano José de Larra)